Como dijo Papaji, la Felicidad es permanente. Siempre está ahí. Lo que va y viene es infelicidad. Si te identificas con aquello que es permanente y siempre está ahí, serás la Felicidad misma. 

Buscamos la felicidad fuera de nosotros mismos, condenándonos a la infelicidad puesto que no podemos re-conocer lo que no conocemos.

Felicidad, amor, salud, inspiración, éxito, perdón, paz, riqueza y todo aquello que buscamos podría estar aporreando nuestra puerta y seríamos sordos y ciegos a ello si no podemos encontrarlo en nuestro interior, si nos sentimos separados de ello.

Cuando empezamos a buscarlo dentro, como cuando buscamos un objeto en un cajón de sastre,  primero suele aparecer tooodo aquello que no buscamos, incluso que tenemos ahí porque no queremos verlo o no sabemos qué hacer con ello.  También puede suceder que encontremos cosas importantes que habíamos olvidado.

En todo caso, es una aventura apasionante que comienza cuando elijo ser feliz.